La época de calor viene acompañada de una serie de molestias: el sudor, el cansancio, la sed, los golpes de calor, pero quizá uno de los más molestos es el aumento de los insectos.

Para controlarlos existen muchas opciones, como los insecticidas y repelentes, pero a menudo estos, debido a los químicos, suelen resultar casi tan molestos como los bichos.

En este contexto la Universidad de Guadalajara (UAG), a través de su programa de Ingeniería Agropecuaria, ha compartido una lista de plantas aromáticas que ayudan a controlar estos insectos, de una manera mucho más natural y amigable con el entorno y que además, son fáciles de cultivar.

«Existen plantas que, además de embellecer los espacios, ayudan a repeler insectos gracias a la liberación de compuestos como aceites esenciales y terpenos. Estas especies se adaptan bien a diversos climas y pueden colocarse en interiores o exteriores del hogar», explica Jaime Alcalá Gómez, Profesor Investigador de la UAG.

A continuación te compartimos 7 plantas que pueden ayudarte a mantener a los molestos insectos a raya en esta temporada:

Citronela (Cymbopogon nardus)

Posee un aroma cítrico, por lo que es uno de los repelentes naturales más conocidos contra mosquitos.

Lavanda (Lavandula angustifolia)

Su aroma agradable para las personas resulta repelente para mosquitos, polillas y moscas.

Albahaca (Ocimum basilicum)

Además de los usos culinarios, ayuda como repelente de mosquitos y mosca doméstica.

Menta (Mentha spicata)

Por su aroma mentolado, evita la entrada de hormigas, pulgones y mosquitos.

Romero (Rosmarinus officinalis)

Excelente repelente contra mosquitos y algunos tipos de moscas, además de su resistencia al calor y sequía.

Caléndula (Calendula officinalis)

Funciona como repelente de mosquitos y nematodos en el suelo, además embellece los jardines por su colorida floración.

Geranio perfumado (Pelargonium graveolens)

Produce aceites con efecto repelente principalmente contra mosquitos.

Para su cuidado, Alcalá Gómez recomienda ubicarlas en zonas estratégicas como ventanas, entradas o terrazas para asegurarse de que reciban luz solar suficiente, especialmente la lavanda y el romero.

También recomienda controlar el riego para evitar exceso de humedad que favorezca otras plagas.